Imagen: Diario Austral de Osorno
Una baja ostensible de peso, aunque buen ánimo, registran los cuatro activistas mapuche que cumplen hoy 40 días en huelga de hambre en el Centro Penitenciario de Angol.
Uno de los huelguistas es el osornino y ex líder de la Coordinadora Arauco Malleco, Héctor Llaitul, quien suma ya cuatro protestas de este tipo, siendo la última y la más prolongada la que efectuó el año pasado, donde estuvo 83 días junto a otros compañeros, la que puso en serio riesgo su estado de salud.
La abogada Victoria Fariña, jurista que representa a Jonathan Huillical, quien fue sentenciado a 20 años de cárcel por los delitos de homicidio frustrado al fiscal Elgueta y robo con intimidación (los mismos que condenaron a Llaitul a 25 de presidio), contó que existe una preocupación evidente por el estado de los huelguistas, especialmente por el osornino, ante eventuales secuelas a largo plazo que tendría la huelga de hambre en su organismo.
«Ellos están de buen ánimo. Su baja de peso es constante día a día. Se mantienen en buen estado en general. Sin embargo, nosotros, los abogados, estamos bastante preocupados por la situación de ellos desde el punto de vista judicial, ya que aún no se aclara», expresó la profesional.
Fariña, quien interpuso junto a otros abogados un recurso para anular el juicio que sentenció a 25 años de cárcel a Llaitul y 20 a los otros tres comuneros, entre ellos a su representado Jonathan Huillical, está a la espera de lo que resuelva la Corte Suprema respecto a esta solicitud legal, la que acogió a trámite la semana pasada.
TIEMPO
Sin embargo, aclaró, el tiempo que se demore la resolución afectará la salud de los huelguistas.
«Eventualmente si lográramos nuestro objetivo de que la Corte Suprema lo declare nulo y exista un nuevo juicio, claramente la salud de ellos se va deteriorando día a día», dijo.
Cabe recordar que durante la semana varias protestas se llevaron a cabo en distintas ciudades del país para dar a conocer la situación de los huelguistas, como asimismo exigir que la justicia revoque la sentencia y se practique un nuevo proceso judicial.
La defensora explicó que los recursos de nulidad fueron presentados por separado por cada representante legal, aunque varias causales fueron coincidentes, como las infracciones que se cometieron a las garantías constitucionales, al debido proceso y a la utilización de testigos protegidos, amparados bajo la ley antiterrorista.
«Aquí hubo una contradicción abierta, ya que el mismo tribunal consideró que los delitos no fueron de carácter terrorista. Además, no existió imparcialidad de los jueces, ya que uno de ellos conoció antecedentes previos en relación a otras causas, por ejemplo», explicó la abogada, quien espera la decisión de la Corte Suprema.
Fuente: Diario Austral de Osorno (24.04.2011)