Fotografía: Reunión en Rucapihuel | Prensa Diputado Hernández
Con fecha 24 de marzo de 2015, el equipo de prensa del diputado Javier Hernández (UDI) difundió una nota en la que el parlamentario planteó la urgente necesidad de que el Ministerio de Agricultura implementase medidas especiales para los “pequeños productores agrícolas” de las comunidades williche de San Juan de la Costa, enfatizando que la falta de agua es un problema estructural que requiere medidas definitivas. Dichas declaraciones contrastan con los dichos del parlamentario que, en el apogeo del rechazo de la privatización de los derechos de aguas superficiales por parte de hidroeléctricas, no tuvo reparos en señalar que las comunidades mapuche son un obstáculo al “desarrollo” energético en Chile.
Tras una reunión llevada a cabo en marzo pasado en el sector Rucapihuel, instancia en la cual conversó con representantes y dirigentes mapuche de San Juan de la Costa, el diputado manifestó “comprender el descontento que tiene las comunidades, ya que para ellos el tema de la falta de agua ya no responde a una situación coyuntural, sino que es un problema estructural”. Calificando la situación como grave, el parlamentario de oposición fue enfático en señalar que el problema no se soluciona con un decreto de emergencia agrícola y que debe ser abordado con medidas mucho más profundas.
La nota de prensa destaca además la participación de dirigentes mapuche y funcionarios de gobierno: “[e]stuvimos participando junto al lonko Efraín Antriao, la dirigente María Huisca y representantes de la seremía de agricultura, básicamente escuchando los planteamientos de las personas que viven en las comunidades y que están sufriendo por la falta de agua para sus labores productivas, para sus animales, para sus tareas domésticas e incluso para el consumo humano”.
Fotografía: Diputado Javier Hernández | http://historiapolitica.bcn.cl/
Frente a las declaraciones del diputado, dadas en el contexto de su pertenencia a la oposición al gobierno de turno, se observa una aparente voluntad de escuchar y entender las visiones de las comunidades mapuche williche. Sin embargo, hemos de remitirnos al 4 de septiembre de 2013, día en el cual el medio Biobiochile.cl hizo público un audio en el que el honorable señaló que las comunidades mapuche son un obstáculo a la materialización de los proyectos energéticos al exigir derechos tan elementales como la consulta previa, constituyendo así una traba al avance de Chile en esta materia tan urgente para algunos sectores:
Audio: Biobiochile.cl
Estas declaraciones aparecieron unas semanas antes de una reunión que estaba fijada para el jueves 26 de septiembre de 2013 entre comunidades mapuche williche y los parlamentarios de la zona, encuentro al que el diputado y entonces candidato Javier Hernández no llegó. Aprovechando la ocasión, recordamos que en dicha reunión los candidatos a parlamentarios por la zona de Osorno se comprometieron a impulsar las ideas eje de las demandas del territorio williche (::: Descargar documento aquí :::). Hasta ahora, no ha habido un pronunciamiento oficial de parte de alguno de los parlamentarios actuales en el que se de cuenta de los avances en los compromisos adquiridos… ¿O fue solamente una estrategia para obtener más votos?
Como se puede observar, el problema del agua en la Fütawillimapu, tanto por su falta como por su privatización por parte de grandes grupos económicos, ha sido objeto de instrumentalización mezquina por parte de parlamentarios y funcionarios estatales locales. Sin embargo, hasta la fecha no hemos tenido información ni del gobierno de turno, ni de la oposición, ni (lamentablemente) menos de nuestras propias comunidades mapunche acerca de propuestas claras y consensuadas que apunten a restablecer el küme mongen yel fill mongen, y a disminuir los periodos de sequía, sin pensar en ganancias políticas particulares de corto plazo.
Necesario es reiterar que no nos sirven los emotivos discursos, las palmaditas en la espalda, las vestiduras rasgadas, los enfrentamientos a través de los medios, ni los gritos a los cuatro vientos por parte de los parlamentarios, menos aún cuando cada vez se van conociendo con mayor profundidad las redes de corrupción y vínculos económicos que operan transversalmente en la política chilena.
Lo que sí nos sirve es el reconocimiento constitucional como pueblos/naciones preexistentes a Chile y nuestros territorios ancestrales: la base material que sustenta nuestros derechos colectivos y que, por lo mismo, debe quedar ajena al avance depredador de las empresas forestales, mineras, hidroeléctricas, industrias farmacéuticas, pesqueras, etc. Sí nos sirve que se derogue el Decreto 701 y se fomente la recuperación del bosque nativo. Sí nos sirve que las aguas circulantes o presentes en territorio mapuche, no sean objeto de privatización. Sí nos sirve que el Estado de Chile expropie las tierras ocupadas por empresas forestales y se devuelvan a nuestro Pueblo, ya sea a comunidades en particular o a través de reservas de bosque nativo de uso común en base al As Mapu. Esas son las «medidas profundas» a las que probablemente se refiere el diputado Hernández.