A los 79 años de edad ha tomado el camino hacia la mapu de los alwe, para reunirse con sus ancestros, la reconocida lamuen Rosalba Rohe Cardenas de Pichilafquenmapu. Directora de Banda de Rogativa y mantenedora de tradiciones culturales y rituales desde su niñez, junto a su padre el Chau Juan Antonio Segundo Rohe Catalán.
Nació un 9 de marzo de 1941, en el fundo Puella La Cumbre, luego alrededor de los 7 años llegó a vivir al territorio de Lafquenmapu, donde entre los 14 a 20 años comenzó su participación en la Bandas de Rogativa, que dirigía su chau, y desde entonces casi nunca estuvo ausente de un ngillatun, ni de otras actividades culturales o religiosas de su San Juan de la Costa, e invitada también a otros territorios para compartir su kimün, su nütram y con su casi perpetua alegría junto a un mate con sopaipillas.
En julio de 2019, sus hermanos y hermanas kimche del Consejo de Cultores de San Juan de la Costa, en Bahía Mansa, le hicieron un reconocimiento a su trayectoria como mujer williche y mantenedora de la tradición y las costumbres ancestrales, otorgándole la estatuilla del “Bandio williche”. Recibió en esa ocasión, a nombre de ella, su hija María Virginia Aucapan Rohe, porque la Ñaña Rosalba ya se encontraba muy delicada de salud en aquel momento.
De la misma manera, el 15 de febrero de 2014, la Comunidad Indígena Kiyemtuain de Pualhue, le otorga el reconocimiento a su trayectoria como Directora de la Banda de Rogativa de Pichilafquenmapu, en una ceremonia realizada con motivo de la Semana Cultural que se realiza cada año en este territorio.
La lamuen Rosalba Rohe, deja un importante legado cultural, no solo a su familia más cercana, sino que también a todos quienes pudimos y pudieron compartir con ella, además de su sabiduría plena y perseverancia, nos lega igual su sencillez, su nütram y su afecto.
Ponciano Rumian L.
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